EN PAZ ME ACOSTARE, Y ASIMISMO DORMIRE; PORQUE SOLO TU, JEHOVA, ME HACE VIVIR CONFIADO - Salmos 4:1-8

Dice el Salmo 4:8  En paz me acostaré, y asimismo dormiré ; Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado.

¿Qué es lo que hace a David decir: EN PAZ ME ACOSTARÉ, Y ASIMISMO DORMIRÉ; PORQUE SOLO TÚ, JEHOVÁ, ME HACES VIVIR CONFIADO?

¿Cómo orar juntos este fin de semana y otros días, a fin que podamos vivir confiadamente?

A veces no sabemos cómo enfrentar a los que nos calumnian y tampoco como ayudar a nuestros amigos que están a punto de tirar la toalla. El salmo de hoy nos enseña que una manera de hacerlo es a través de la oración, pero ¿Cómo orar? Acompáñanos a conocer la estructura de este salmo para así aprender a hacerlo.

En el salmo en el estamos reflexionando este fin de semana, el salmo cuatro, el rey David ora a Dios en cuatro grandes pasos; en el versículo 1 nos introduce al tema principal de su clamor: la confianza; en el segundo, versos 2 al 5, se expresa frente a sus adversarios a los cuales guía a confiarle su vida a Dios.

En el tercero, del v 6 al 7, a sus amigos que están en medio de situaciones difíciles y ante ello están perdiendo su fe, les comunica su experiencia de confianza en Dios en medio de situaciones similares. Para finalmente en el v8 expresar que puede experimentar paz, porque ha puesto su confianza en el único que puede hacerle vivir confiado: en Dios. Por eso puede decir "En Paz me acostaré y así mismo dormiré por que solo tu Jehová me haces vivir confiado". Si usted confía en Dios usted puede dercir: En Paz me acostaré porque Dios me hace vivir confiado.

En el V1 El rey David  se encuentra clamando a Dios, pero con la confianza puesta en él, ya que Dios lo ha aliviado cuando ha estado en angustia. Clama estando en su cama, pero lo hace teniendo en su mente dos situaciones concretas que ha vivido de manera emotiva, mental y religiosa. Así ora a Dios, en medio de la angustia que esto le trae a su vida.

En los v2 al v5 habla a los nobles que  lo están poniendo en deshonra, les pregunta que hasta cuándo seguirán deshonrándolo, amando la vanidad y buscando la mentira. Está pregunta comunica que el atentado contra su prestigio está durando demasiado y que debe parar, pero David nos los condena sino que después de llamarles la atención les invita a una conversión por medio de un proceso de siete imperativos enmarcados en tres momentos: reconocer, temblar y no pecar, en el primero, para después: meditar y callad en el segundo, para luego poder terminar con: ofrecer y confiar. Miremos esta invitación con más detalle.

El primer momento, V3 y 4ª, les dice que a pesar de lo que ellos dicen de él, Dios lo ha respaldado, ante tal verdad, les invita a que reconozcan esto como un hecho de Dios, lo cual les debe de llevar a temblar de respeto ante el Señor, y de ay a no pecar más. El segundo momento v4b, es el de reflexionar de manera silenciosa para prolongar el reconocimiento y asimilar el temblor, para ello se les invita a meditar en el corazón y a callar mientras están en la cama.

Como último momento v5, les pide que ofrezcan sacrificios de justicia; es decir: acciones que muestran una verdadera conversión interna, y finalmente se les pide que confíen su vida a Dios. Así, esta invitación a un proceso de conversión los llevaría a gozar de la paz que da la confianza en Dios.

David sigue orando; en los v6 al 7, se expresa con la segunda situación, se trata al parecer de sus amigos que aunque creen en Dios, al enfrentarse a situaciones difíciles ahora dicen que ya no hay quien les muestre el bien ya que sienten que el Señor se ha ido; su fe está en crisis.

David sigue orando en voz alta como queriendo que sus amigos desanimados lo escuchen y así recobren su confianza en Dios; expresa que él también ha soportado esas situaciones manteniendo su fe viva y vivencial, por ello le clama a Dios que alce sobre ellos la luz de su rostro, comunica la alegría que Dios le ha dado en estos mismos momentos difíciles, la cual es mayor que la que viene en buenos momentos como la cosecha.

David levanta este clamor a Dios en voz alta, trayendo a la memoria estas situaciones difíciles; por un lado, a los que les deshonran y que necesitan arrepentirse, y a sus amigos, que aunque creen en Dios su confianza está en crisis. A unos les responde con una guía para el arrepentimiento y a los otros con un clamor a Dios porque a  todos les muestre el bien y con el testimonio de su experiencia personal de confianza en él.

Así David resuelve la tensión en la que se encuentra, poniendo su confianza en Señor por medio de la oración, en voz alta, al parecer para invitar tanto a los unos como a los otros a confiarle su vida a Dios.  El decía: En Paz me acostaré.

Hoy sábado como el resto del fin de semana es un buen momento para pensar en la manera en que hemos conocido a Dios. Semejante a David, nosotros también hemos experimentado el alivio de Dios en otros momentos, hemos gozado de su gracia al permitirnos conocer a Jesús, nuestro salvador, en quien podemos poner nuestra confianza ya que él tiene poder tanto en el cielo como en la tierra.

Estos días también son un buen momento para que basados es esta confianza en él, le expresemos lo que tenemos en el corazón, lo que ha pasado esta semana, los chismes de los que hemos sido objeto, expresarle como nos sentimos en medio de las calumnias que han lanzado contra nosotros. Y también para pedirle que ampare a nuestros amigos y familiares que sabemos que están sucumbiendo ante las realidades que están viviendo y ante las cuales creen que Dios se ha alejado de ellos.

Pero también estos días de descanso, también es momento de estar juntos, y de congregarnos como iglesia, reunirnos como familia, con nuestros amigos y aun con aquellos con los que precisamente nos calumnian, compañeros de estudio y/o trabajo. En nuestra congregación, familia y amigos podemos orar en voz alta anunciando las bondades de Dios para con nosotros y así ayudarles a los que quieren tirar la toalla.

Reunidos con los que no son tanto de nuestros afectos podemos mostrarles el amor de Jesús y así posteriormente poder guiarlos en un proceso de conversión donde puedan cambiar su vida confiándosela al Señor.

Para que de esta manera, todos podamos decir juntamente con David:”…En paz me acostaré, y asimismo dormiré; Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado…”

Idea central: En Paz me acostaré porque Dios me hace vivir confiado.