Palabra Clave: ciento

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Genesis 5:3. Y vivió Adán ciento treinta años, y engendró un hijo a su semejanza, conforme a su imagen, y llamó su nombre Set.
Genesis 5:4. Y fueron los días de Adán después que engendró a Set, ochocientos años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 5:5. Y fueron todos los días que vivió Adán novecientos treinta años; y murió.
Genesis 5:6. Vivió Set ciento cinco años, y engendró a Enós.
Genesis 5:7. Y vivió Set, después que engendró a Enós, ochocientos siete años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 5:8. Y fueron todos los días de Set novecientos doce años; y murió.
Genesis 5:10. Y vivió Enós, después que engendró a Cainán, ochocientos quince años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 5:11. Y fueron todos los días de Enós novecientos cinco años; y murió.
Genesis 5:13. Y vivió Cainán, después que engendró a Mahalaleel, ochocientos cuarenta años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 5:14. Y fueron todos los días de Cainán novecientos diez años; y murió.
Genesis 5:16. Y vivió Mahalaleel, después que engendró a Jared, ochocientos treinta años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 5:17. Y fueron todos los días de Mahalaleel ochocientos noventa y cinco años; y murió.
Genesis 5:18. Vivió Jared ciento sesenta y dos años, y engendró a Enoc.
Genesis 5:19. Y vivió Jared, después que engendró a Enoc, ochocientos años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 5:20. Y fueron todos los días de Jared novecientos sesenta y dos años; y murió.
Genesis 5:22. Y caminó Enoc con Dios, después que engendró a Matusalén, trescientos años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 5:23. Y fueron todos los días de Enoc trescientos sesenta y cinco años.
Genesis 5:25. Vivió Matusalén ciento ochenta y siete años, y engendró a Lamec.
Genesis 5:26. Y vivió Matusalén, después que engendró a Lamec, setecientos ochenta y dos años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 5:27. Fueron, pues, todos los días de Matusalén novecientos sesenta y nueve años; y murió.
Genesis 5:28. Vivió Lamec ciento ochenta y dos años, y engendró un hijo;
Genesis 5:31. Y fueron todos los días de Lamec setecientos setenta y siete años; y murió.
Genesis 6:3. Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años.
Genesis 6:15. Y de esta manera la harás: de trescientos codos la longitud del arca, de cincuenta codos su anchura, y de treinta codos su altura.
Genesis 7:6. Era Noé de seiscientos años cuando el diluvio de las aguas vino sobre la tierra.
Genesis 7:11. El año seiscientos de la vida de Noé, en el mes segundo, a los diecisiete días del mes, aquel día fueron rotas todas las fuentes del grande abismo, y las cataratas de los cielos fueron abiertas,
Genesis 7:24. Y prevalecieron las aguas sobre la tierra ciento cincuenta días.
Genesis 8:3. Y las aguas decrecían gradualmente de sobre la tierra; y se retiraron las aguas al cabo de ciento cincuenta días.
Genesis 8:13. Y sucedió que en el año seiscientos uno de Noé, en el mes primero, el día primero del mes, las aguas se secaron sobre la tierra; y quitó Noé la cubierta del arca, y miró, y he aquí que la faz de la tierra estaba seca.
Genesis 9:28. Y vivió Noé después del diluvio trescientos cincuenta años.
Genesis 9:29. Y fueron todos los días de Noé novecientos cincuenta años; y murió.
Genesis 11:13. Y vivió Arfaxad, después que engendró a Sala, cuatrocientos tres años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 11:15. Y vivió Sala, después que engendró a Heber, cuatrocientos tres años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 11:17. Y vivió Heber, después que engendró a Peleg, cuatrocientos treinta años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 11:19. Y vivió Peleg, después que engendró a Reu, doscientos nueve años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 11:21. Y vivió Reu, después que engendró a Serug, doscientos siete años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 11:23. Y vivió Serug, después que engendró a Nacor, doscientos años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 11:25. Y vivió Nacor, después que engendró a Taré, ciento diecinueve años, y engendró hijos e hijas.
Genesis 11:32. Y fueron los días de Taré doscientos cinco años; y murió Taré en Harán.
Genesis 14:14. Oyó Abram que su pariente estaba prisionero, y armó a sus criados, los nacidos en su casa, trescientos dieciocho, y los siguió hasta Dan.
Genesis 15:13. Entonces Jehová dijo a Abram: Ten por cierto que tu descendencia morará en tierra ajena, y será esclava allí, y será oprimida cuatrocientos años.
Genesis 23:1. Fue la vida de Sara ciento veintisiete años; tantos fueron los años de la vida de Sara.
Genesis 23:15. Señor mío, escúchame: la tierra vale cuatrocientos siclos de plata; ¿qué es esto entre tú y yo? Entierra, pues, tu muerta.
Genesis 23:16. Entonces Abraham se convino con Efrón, y pesó Abraham a Efrón el dinero que dijo, en presencia de los hijos de Het, cuatrocientos siclos de plata, de buena ley entre mercaderes.
Genesis 25:7. Y estos fueron los días que vivió Abraham: ciento setenta y cinco años.
Genesis 25:17. Y estos fueron los años de la vida de Ismael, ciento treinta y siete años; y exhaló el espíritu Ismael, y murió, y fue unido a su pueblo.
Genesis 26:12. Y sembró Isaac en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno; y le bendijo Jehová.
Genesis 32:6. Y los mensajeros volvieron a Jacob, diciendo: Vinimos a tu hermano Esaú, y él también viene a recibirte, y cuatrocientos hombres con él.
Genesis 33:1. Alzando Jacob sus ojos, miró, y he aquí venía Esaú, y los cuatrocientos hombres con él; entonces repartió él los niños entre Lea y Raquel y las dos siervas.
Genesis 35:28. Y fueron los días de Isaac ciento ochenta años.
Genesis 47:9. Y Jacob respondió a Faraón: Los días de los años de mi peregrinación son ciento treinta años; pocos y malos han sido los días de los años de mi vida, y no han llegado a los días de los años de la vida de mis padres en los días de su peregrinación.
Genesis 47:28. Y vivió Jacob en la tierra de Egipto diecisiete años; y fueron los días de Jacob, los años de su vida, ciento cuarenta y siete años.
Genesis 50:22. Y habitó José en Egipto, él y la casa de su padre; y vivió José ciento diez años.
Genesis 50:26. Y murió José a la edad de ciento diez años; y lo embalsamaron, y fue puesto en un ataúd en Egipto.
Exodo 6:16. Estos son los nombres de los hijos de Leví por sus linajes: Gersón, Coat y Merari. Y los años de la vida de Leví fueron ciento treinta y siete años.
Exodo 6:18. Y los hijos de Coat: Amram, Izhar, Hebrón y Uziel. Y los años de la vida de Coat fueron ciento treinta y tres años.
Exodo 6:20. Y Amram tomó por mujer a Jocabed su tía, la cual dio a luz a Aarón y a Moisés. Y los años de la vida de Amram fueron ciento treinta y siete años.
Exodo 12:37. Partieron los hijos de Israel de Ramesés a Sucot, como seiscientos mil hombres de a pie, sin contar los niños.
Exodo 12:40. El tiempo que los hijos de Israel habitaron en Egipto fue cuatrocientos treinta años.
Exodo 12:41. Y pasados los cuatrocientos treinta años, en el mismo día todas las huestes de Jehová salieron de la tierra de Egipto.
Exodo 14:7. y tomó seiscientos carros escogidos, y todos los carros de Egipto, y los capitanes sobre ellos.
Exodo 18:25. Escogió Moisés varones de virtud de entre todo Israel, y los puso por jefes sobre el pueblo, sobre mil, sobre ciento, sobre cincuenta, y sobre diez.
Exodo 30:23. Tomarás especias finas: de mirra excelente quinientos siclos, y de canela aromática la mitad, esto es, doscientos cincuenta, de cálamo aromático doscientos cincuenta,
Exodo 38:24. Todo el oro empleado en la obra, en toda la obra del santuario, el cual fue oro de la ofrenda, fue veintinueve talentos y setecientos treinta siclos, según el siclo del santuario.
Exodo 38:25. Y la plata de los empadronados de la congregación fue cien talentos y mil setecientos setenta y cinco siclos, según el siclo del santuario;
Exodo 38:26. medio siclo por cabeza, según el siclo del santuario; a todos los que pasaron por el censo, de edad de veinte años arriba, que fueron seiscientos tres mil quinientos cincuenta.
Exodo 38:28. Y de los mil setecientos setenta y cinco siclos hizo los capiteles de las columnas, y cubrió los capiteles de ellas, y las ciñó.
Exodo 38:29. El bronce ofrendado fue setenta talentos y dos mil cuatrocientos siclos,
Levitico 26:8. Cinco de vosotros perseguirán a ciento, y ciento de vosotros perseguirán a diez mil, y vuestros enemigos caerán a filo de espada delante de vosotros.
Numeros 1:23. los contados de la tribu de Simeón fueron cincuenta y nueve mil trescientos.
Numeros 1:25. los contados de la tribu de Gad fueron cuarenta y cinco mil seiscientos cincuenta.
Numeros 1:27. los contados de la tribu de Judá fueron setenta y cuatro mil seiscientos.
Numeros 1:29. los contados de la tribu de Isacar fueron cincuenta y cuatro mil cuatrocientos.
Numeros 1:31. los contados de la tribu de Zabulón fueron cincuenta y siete mil cuatrocientos.
Numeros 1:35. los contados de la tribu de Manasés fueron treinta y dos mil doscientos.
Numeros 1:37. los contados de la tribu de Benjamín fueron treinta y cinco mil cuatrocientos.
Numeros 1:39. los contados de la tribu de Dan fueron sesenta y dos mil setecientos.
Numeros 1:43. los contados de la tribu de Neftalí fueron cincuenta y tres mil cuatrocientos.
Numeros 1:46. fueron todos los contados seiscientos tres mil quinientos cincuenta.
Numeros 2:4. Su cuerpo de ejército, con sus contados, setenta y cuatro mil seiscientos.
Numeros 2:6. Su cuerpo de ejército, con sus contados, cincuenta y cuatro mil cuatrocientos.
Numeros 2:8. Su cuerpo de ejército, con sus contados, cincuenta y siete mil cuatrocientos.
Numeros 2:9. Todos los contados en el campamento de Judá, ciento ochenta y seis mil cuatrocientos, por sus ejércitos, marcharán delante.
Numeros 2:13. Su cuerpo de ejército, con sus contados, cincuenta y nueve mil trescientos.
Numeros 2:15. Su cuerpo de ejército, con sus contados, cuarenta y cinco mil seiscientos cincuenta.
Numeros 2:16. Todos los contados en el campamento de Rubén, ciento cincuenta y un mil cuatrocientos cincuenta, por sus ejércitos, marcharán los segundos.
Numeros 2:21. Su cuerpo de ejército, con sus contados, treinta y dos mil doscientos.
Numeros 2:23. Y su cuerpo de ejército, con sus contados, treinta y cinco mil cuatrocientos.
Numeros 2:24. Todos los contados en el campamento de Efraín, ciento ocho mil cien, por sus ejércitos, irán los terceros.
Numeros 2:26. Su cuerpo de ejército, con sus contados, sesenta y dos mil setecientos.
Numeros 2:30. Su cuerpo de ejército, con sus contados, cincuenta y tres mil cuatrocientos.
Numeros 2:31. Todos los contados en el campamento de Dan, ciento cincuenta y siete mil seiscientos, irán los últimos tras sus banderas.
Numeros 2:32. Estos son los contados de los hijos de Israel, según las casas de sus padres; todos los contados por campamentos, por sus ejércitos, seiscientos tres mil quinientos cincuenta.
Numeros 3:28. El número de todos los varones de un mes arriba era ocho mil seiscientos, que tenían la guarda del santuario.
Numeros 3:34. Los contados de ellos conforme al número de todos los varones de un mes arriba fueron seis mil doscientos.
Numeros 3:43. Y todos los primogénitos varones, conforme al número de sus nombres, de un mes arriba, fueron veintidós mil doscientos setenta y tres.
Numeros 3:46. Y para el rescate de los doscientos setenta y tres de los primogénitos de los hijos de Israel, que exceden a los levitas,
Numeros 3:50. y recibió de los primogénitos de los hijos de Israel, en dinero, mil trescientos sesenta y cinco siclos, conforme al siclo del santuario.
Numeros 4:36. Y fueron los contados de ellos por sus familias, dos mil setecientos cincuenta.
Numeros 4:40. los contados de ellos por sus familias, según las casas de sus padres, fueron dos mil seiscientos treinta.
Numeros 4:44. los contados de ellos, por sus familias, fueron tres mil doscientos.
Numeros 7:13. Su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:19. Ofreció como su ofrenda un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:25. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:31. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:37. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:43. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:49. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:55. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:61. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:67. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:73. Y su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:79. Su ofrenda fue un plato de plata de ciento treinta siclos de peso, y un jarro de plata de setenta siclos, al siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para ofrenda;
Numeros 7:85. Cada plato de ciento treinta siclos, y cada jarro de setenta; toda la plata de la vajilla, dos mil cuatrocientos siclos, al siclo del santuario.
Numeros 7:86. Las doce cucharas de oro llenas de incienso, de diez siclos cada cuchara, al siclo del santuario; todo el oro de las cucharas, ciento veinte siclos.
Numeros 11:21. Entonces dijo Moisés: Seiscientos mil de a pie es el pueblo en medio del cual yo estoy; ¡y tú dices: Les daré carne, y comerán un mes entero!
Numeros 16:2. y se levantaron contra Moisés con doscientos cincuenta varones de los hijos de Israel, príncipes de la congregación, de los del consejo, varones de renombre.
Numeros 16:17. y tomad cada uno su incensario y poned incienso en ellos, y acercaos delante de Jehová cada uno con su incensario, doscientos cincuenta incensarios; tú también, y Aarón, cada uno con su incensario.
Numeros 16:35. También salió fuego de delante de Jehová, y consumió a los doscientos cincuenta hombres que ofrecían el incienso.
Numeros 16:49. Y los que murieron en aquella mortandad fueron catorce mil setecientos, sin los muertos por la rebelión de Coré.
Numeros 26:7. Estas son las familias de los rubenitas; y fueron contados de ellas cuarenta y tres mil setecientos treinta.
Numeros 26:10. y la tierra abrió su boca y los tragó a ellos y a Coré, cuando aquel grupo murió, cuando consumió el fuego a doscientos cincuenta varones, para servir de escarmiento.
Numeros 26:14. Estas son las familias de los simeonitas, veintidós mil doscientos.
Numeros 26:25. Estas son las familias de Isacar, y fueron contados de ellas sesenta y cuatro mil trescientos.
Numeros 26:34. Estas son las familias de Manasés; y fueron contados de ellas cincuenta y dos mil setecientos.
Numeros 26:41. Estos son los hijos de Benjamín por sus familias; y fueron contados de ellos cuarenta y cinco mil seiscientos.
Numeros 26:43. De las familias de los suhamitas fueron contados sesenta y cuatro mil cuatrocientos.
Numeros 26:47. Estas son las familias de los hijos de Aser; y fueron contados de ellas cincuenta y tres mil cuatrocientos.
Numeros 26:50. Estas son las familias de Neftalí por sus familias; y fueron contados de ellas cuarenta y cinco mil cuatrocientos.
Numeros 26:51. Estos son los contados de los hijos de Israel, seiscientos un mil setecientos treinta.
Numeros 31:52. Y todo el oro de la ofrenda que ofrecieron a Jehová los jefes de millares y de centenas fue dieciséis mil setecientos cincuenta siclos.
Numeros 33:39. Era Aarón de edad de ciento veintitrés años, cuando murió en el monte de Hor.
Deuteronomio 31:2. y les dijo: Este día soy de edad de ciento veinte años; no puedo más salir ni entrar; además de esto Jehová me ha dicho: No pasarás este Jordán.
Deuteronomio 34:7. Era Moisés de edad de ciento veinte años cuando murió; sus ojos nunca se oscurecieron, ni perdió su vigor.
Josue 7:21. Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello.
Josue 24:29. Después de estas cosas murió Josué hijo de Nun, siervo de Jehová, siendo de ciento diez años.
Jueces 2:8. Pero murió Josué hijo de Nun, siervo de Jehová, siendo de ciento diez años.
Jueces 3:31. Después de él fue Samgar hijo de Anat, el cual mató a seiscientos hombres de los filisteos con una aguijada de bueyes; y él también salvó a Israel.
Jueces 4:3. Entonces los hijos de Israel clamaron a Jehová, porque aquél tenía novecientos carros herrados, y había oprimido con crueldad a los hijos de Israel por veinte años.
Jueces 4:13. Y reunió Sísara todos sus carros, novecientos carros herrados, con todo el pueblo que con él estaba, desde Haroset- goim hasta el arroyo de Cisón.
Jueces 7:6. Y fue el número de los que lamieron llevando el agua con la mano a su boca, trescientos hombres; y todo el resto del pueblo se dobló sobre sus rodillas para beber las aguas.
Jueces 7:7. Entonces Jehová dijo a Gedeón: Con estos trescientos hombres que lamieron el agua os salvaré, y entregaré a los madianitas en tus manos; y váyase toda la demás gente cada uno a su lugar.
Jueces 7:8. Y habiendo tomado provisiones para el pueblo, y sus trompetas, envió a todos los israelitas cada uno a su tienda, y retuvo a aquellos trescientos hombres; y tenía el campamento de Madián abajo en el valle.
Jueces 7:16. Y repartiendo los trescientos hombres en tres escuadrones, dio a todos ellos trompetas en sus manos, y cántaros vacíos con teas ardiendo dentro de los cántaros.
Jueces 7:22. Y los trescientos tocaban las trompetas; y Jehová puso la espada de cada uno contra su compañero en todo el campamento. Y el ejército huyó hasta Bet-sita, en dirección de Zerera, y hasta la frontera de Abel-mehola en Tabat.
Jueces 8:4. Y vino Gedeón al Jordán, y pasó él y los trescientos hombres que traía consigo, cansados, mas todavía persiguiendo.
Jueces 8:10. Y Zeba y Zalmuna estaban en Carcor, y con ellos su ejército como de quince mil hombres, todos los que habían quedado de todo el ejército de los hijos del oriente; pues habían caído ciento veinte mil hombres que sacaban espada.
Jueces 8:26. Y fue el peso de los zarcillos de oro que él pidió, mil setecientos siclos de oro, sin las planchas y joyeles y vestidos de púrpura que traían los reyes de Madián, y sin los collares que traían sus camellos al cuello.
Jueces 11:26. Cuando Israel ha estado habitando por trescientos años a Hesbón y sus aldeas, a Aroer y sus aldeas, y todas las ciudades que están en el territorio de Arnón, ¿por qué no las habéis recobrado en ese tiempo?
Jueces 17:4. Mas él devolvió el dinero a su madre, y tomó su madre doscientos siclos de plata y los dio al fundidor, quien hizo de ellos una imagen de talla y una de fundición, la cual fue puesta en la casa de Micaía.
Jueces 18:11. Entonces salieron de allí, de Zora y de Estaol, seiscientos hombres de la familia de Dan, armados de armas de guerra.
Jueces 18:16. Y los seiscientos hombres, que eran de los hijos de Dan, estaban armados de sus armas de guerra a la entrada de la puerta.
Jueces 18:17. Y subiendo los cinco hombres que habían ido a reconocer la tierra, entraron allá y tomaron la imagen de talla, el efod, los terafines y la imagen de fundición, mientras estaba el sacerdote a la entrada de la puerta con los seiscientos hombres armados de armas de guerra.
Jueces 20:2. Y los jefes de todo el pueblo, de todas las tribus de Israel, se hallaron presentes en la reunión del pueblo de Dios, cuatrocientos mil hombres de a pie que sacaban espada.
Jueces 20:10. Tomaremos diez hombres de cada ciento por todas las tribus de Israel, y ciento de cada mil, y mil de cada diez mil, que lleven víveres para el pueblo, para que yendo a Gabaa de Benjamín le hagan conforme a toda la abominación que ha cometido en Israel.
Jueces 20:15. Y fueron contados en aquel tiempo los hijos de Benjamín de las ciudades, veintiséis mil hombres que sacaban espada, sin los que moraban en Gabaa, que fueron por cuenta setecientos hombres escogidos.
Jueces 20:16. De toda aquella gente había setecientos hombres escogidos, que eran zurdos, todos los cuales tiraban una piedra con la honda a un cabello, y no erraban.
Jueces 20:17. Y fueron contados los varones de Israel, fuera de Benjamín, cuatrocientos mil hombres que sacaban espada, todos estos hombres de guerra.
Jueces 20:47. Pero se volvieron y huyeron al desierto a la peña de Rimón seiscientos hombres, los cuales estuvieron en la peña de Rimón cuatro meses.
1 Samuel 11:8. Y los contó en Bezec; y fueron los hijos de Israel trescientos mil, y treinta mil los hombres de Judá.
1 Samuel 13:15. Y levantándose Samuel, subió de Gilgal a Gabaa de Benjamín. Y Saúl contó la gente que se hallaba con él, como seiscientos hombres.
1 Samuel 14:2. Y Saúl se hallaba al extremo de Gabaa, debajo de un granado que hay en Migrón, y la gente que estaba con él era como seiscientos hombres.
1 Samuel 15:4. Saúl, pues, convocó al pueblo y les pasó revista en Telaim, doscientos mil de a pie, y diez mil hombres de Judá.
1 Samuel 17:7. El asta de su lanza era como un rodillo de telar, y tenía el hierro de su lanza seiscientos siclos de hierro; e iba su escudero delante de él.
1 Samuel 18:27. se levantó David y se fue con su gente, y mató a doscientos hombres de los filisteos; y trajo David los prepucios de ellos y los entregó todos al rey, a fin de hacerse yerno del rey. Y Saúl le dio su hija Mical por mujer.
1 Samuel 22:2. Y se juntaron con él todos los afligidos, y todo el que estaba endeudado, y todos los que se hallaban en amargura de espíritu, y fue hecho jefe de ellos; y tuvo consigo como cuatrocientos hombres.
1 Samuel 23:13. David entonces se levantó con sus hombres, que eran como seiscientos, y salieron de Keila, y anduvieron de un lugar a otro. Y vino a Saúl la nueva de que David se había escapado de Keila, y desistió de salir.
1 Samuel 25:13. Entonces David dijo a sus hombres: Cíñase cada uno su espada. Y se ciñó cada uno su espada y también David se ciñó su espada; y subieron tras David como cuatrocientos hombres, y dejaron doscientos con el bagaje.
1 Samuel 25:18. Entonces Abigail tomó luego doscientos panes, dos cueros de vino, cinco ovejas guisadas, cinco medidas de grano tostado, cien racimos de uvas pasas, y doscientos panes de higos secos, y lo cargó todo en asnos.
1 Samuel 27:2. Se levantó, pues, David, y con los seiscientos hombres que tenía consigo se pasó a Aquis hijo de Maoc, rey de Gat.
1 Samuel 29:2. Y cuando los príncipes de los filisteos pasaban revista a sus compañías de a ciento y de a mil hombres, David y sus hombres iban en la retaguardia con Aquis.
1 Samuel 30:9. Partió, pues, David, él y los seiscientos hombres que con él estaban, y llegaron hasta el torrente de Besor, donde se quedaron algunos.
1 Samuel 30:10. Y David siguió adelante con cuatrocientos hombres; porque se quedaron atrás doscientos, que cansados no pudieron pasar el torrente de Besor.
1 Samuel 30:17. Y los hirió David desde aquella mañana hasta la tarde del día siguiente; y no escapó de ellos ninguno, sino cuatrocientos jóvenes que montaron sobre los camellos y huyeron.
1 Samuel 30:21. Y vino David a los doscientos hombres que habían quedado cansados y no habían podido seguir a David, a los cuales habían hecho quedar en el torrente de Besor; y ellos salieron a recibir a David y al pueblo que con él estaba. Y cuando David llegó a la gente, les saludó con paz.
2 Samuel 2:31. Mas los siervos de David hirieron de los de Benjamín y de los de Abner, a trescientos sesenta hombres, los cuales murieron.
2 Samuel 8:4. Y tomó David de ellos mil setecientos hombres de a caballo, y veinte mil hombres de a pie; y desjarretó David los caballos de todos los carros, pero dejó suficientes para cien carros.
2 Samuel 10:18. Mas los sirios huyeron delante de Israel; y David mató de los sirios a la gente de setecientos carros, y cuarenta mil hombres de a caballo; hirió también a Sobac general del ejército, quien murió allí.
2 Samuel 14:26. Cuando se cortaba el cabello (lo cual hacía al fin de cada año, pues le causaba molestia, y por eso se lo cortaba), pesaba el cabello de su cabeza doscientos siclos de peso real.
2 Samuel 15:11. Y fueron con Absalón doscientos hombres de Jerusalén convidados por él, los cuales iban en su sencillez, sin saber nada.
2 Samuel 15:18. Y todos sus siervos pasaban a su lado, con todos los cereteos y peleteos; y todos los geteos, seiscientos hombres que habían venido a pie desde Gat, iban delante del rey.
2 Samuel 16:1. Cuando David pasó un poco más allá de la cumbre del monte, he aquí Siba el criado de Mefi-boset, que salía a recibirle con un par de asnos enalbardados, y sobre ellos doscientos panes, cien racimos de pasas, cien panes de higos secos, y un cuero de vino.
2 Samuel 18:4. Entonces el rey les dijo: Yo haré lo que bien os parezca. Y se puso el rey a la entrada de la puerta, mientras salía todo el pueblo de ciento en ciento y de mil en mil.
2 Samuel 21:16. E Isbi-benob, uno de los descendientes de los gigantes, cuya lanza pesaba trescientos siclos de bronce, y quien estaba ceñido con una espada nueva, trató de matar a David;
2 Samuel 23:8. Estos son los nombres de los valientes que tuvo David: Joseb-basebet el tacmonita, principal de los capitanes; éste era Adino el eznita, que mató a ochocientos hombres en una ocasión.
2 Samuel 23:18. Y Abisai hermano de Joab, hijo de Sarvia, fue el principal de los treinta. Este alzó su lanza contra trescientos, a quienes mató, y ganó renombre con los tres.
2 Samuel 24:9. Y Joab dio el censo del pueblo al rey; y fueron los de Israel ochocientos mil hombres fuertes que sacaban espada, y los de Judá quinientos mil hombres.
1 Reyes 5:16. sin los principales oficiales de Salomón que estaban sobre la obra, tres mil trescientos, los cuales tenían a cargo el pueblo que hacía la obra.
1 Reyes 6:1. En el año cuatrocientos ochenta después que los hijos de Israel salieron de Egipto, el cuarto año del principio del reino de Salomón sobre Israel, en el mes de Zif, que es el mes segundo, comenzó él a edificar la casa de Jehová.
1 Reyes 8:63. Y ofreció Salomón sacrificios de paz, los cuales ofreció a Jehová: veintidós mil bueyes y ciento veinte mil ovejas. Así dedicaron el rey y todos los hijos de Israel la casa de Jehová.
1 Reyes 9:14. E Hiram había enviado al rey ciento veinte talentos de oro.
1 Reyes 9:28. los cuales fueron a Ofir y tomaron de allí oro, cuatrocientos veinte talentos, y lo trajeron al rey Salomón.
1 Reyes 10:10. Y dio ella al rey ciento veinte talentos de oro, y mucha especiería, y piedras preciosas; nunca vino tan gran cantidad de especias, como la reina de Sabá dio al rey Salomón.
1 Reyes 10:14. El peso del oro que Salomón tenía de renta cada año, era seiscientos sesenta y seis talentos de oro;
1 Reyes 10:16. Hizo también el rey Salomón doscientos escudos grandes de oro batido; seiscientos siclos de oro gastó en cada escudo.
1 Reyes 10:17. Asimismo hizo trescientos escudos de oro batido, en cada uno de los cuales gastó tres libras de oro; y el rey los puso en la casa del bosque del Líbano.
1 Reyes 10:26. Y juntó Salomón carros y gente de a caballo; y tenía mil cuatrocientos carros, y doce mil jinetes, los cuales puso en las ciudades de los carros, y con el rey en Jerusalén.
1 Reyes 10:29. Y venía y salía de Egipto, el carro por seiscientas piezas de plata, y el caballo por ciento cincuenta; y así los adquirían por mano de ellos todos los reyes de los heteos, y de Siria.
1 Reyes 12:21. Y cuando Roboam vino a Jerusalén, reunió a toda la casa de Judá y a la tribu de Benjamín, ciento ochenta mil hombres, guerreros escogidos, con el fin de hacer guerra a la casa de Israel, y hacer volver el reino a Roboam hijo de Salomón.
1 Reyes 18:19. Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de Jezabel.
1 Reyes 18:22. Y Elías volvió a decir al pueblo: Sólo yo he quedado profeta de Jehová; mas de los profetas de Baal hay cuatrocientos cincuenta hombres.
1 Reyes 20:15. Entonces él pasó revista a los siervos de los príncipes de las provincias, los cuales fueron doscientos treinta y dos. Luego pasó revista a todo el pueblo, a todos los hijos de Israel, que fueron siete mil.
1 Reyes 22:6. Entonces el rey de Israel reunió a los profetas, como cuatrocientos hombres, a los cuales dijo: ¿Iré a la guerra contra Ramot de Galaad, o la dejaré? Y ellos dijeron: Sube, porque Jehová la entregará en mano del rey.
2 Reyes 3:26. Y cuando el rey de Moab vio que era vencido en la batalla, tomó consigo setecientos hombres que manejaban espada, para atacar al rey de Edom; mas no pudieron.
2 Reyes 14:13. Además Joás rey de Israel tomó a Amasías rey de Judá, hijo de Joás hijo de Ocozías, en Bet-semes; y vino a Jerusalén, y rompió el muro de Jerusalén desde la puerta de Efraín hasta la puerta de la esquina, cuatrocientos codos.
2 Reyes 18:14. Entonces Ezequías rey de Judá envió a decir al rey de Asiria que estaba en Laquis: Yo he pecado; apártate de mí, y haré todo lo que me impongas. Y el rey de Asiria impuso a Ezequías rey de Judá trescientos talentos de plata, y treinta talentos de oro.
2 Reyes 19:35. Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová, y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos.
1 Cronicas 5:18. Los hijos de Rubén y de Gad, y la media tribu de Manasés, hombres valientes, hombres que traían escudo y espada, que entesaban arco, y diestros en la guerra, eran cuarenta y cuatro mil setecientos sesenta que salían a batalla.
1 Cronicas 7:2. Los hijos de Tola: Uzi, Refaías, Jeriel, Jahmai, Jibsam y Semuel, jefes de las familias de sus padres. De Tola fueron contados por sus linajes en el tiempo de David, veintidós mil seiscientos hombres muy valerosos.
1 Cronicas 7:9. Y contados por sus descendencias, por sus linajes, los que eran jefes de familias resultaron veinte mil doscientos hombres de grande esfuerzo.
1 Cronicas 7:11. Todos éstos fueron hijos de Jediael, jefes de familias, hombres muy valerosos, diecisiete mil doscientos que salían a combatir en la guerra.
1 Cronicas 8:40. Y fueron los hijos de Ulam hombres valientes y vigorosos, flecheros diestros, los cuales tuvieron muchos hijos y nietos, ciento cincuenta. Todos éstos fueron de los hijos de Benjamín.
1 Cronicas 9:6. De los hijos de Zera, Jeuel y sus hermanos, seiscientos noventa.
1 Cronicas 9:9. Y sus hermanos por sus linajes fueron novecientos cincuenta y seis. Todos estos hombres fueron jefes de familia en sus casas paternas.
1 Cronicas 9:13. y sus hermanos, jefes de sus casas paternas, en número de mil setecientos sesenta, hombres muy eficaces en la obra del ministerio en la casa de Dios.
1 Cronicas 9:22. Todos éstos, escogidos para guardas en las puertas, eran doscientos doce cuando fueron contados por el orden de sus linajes en sus villas, a los cuales constituyó en su oficio David y Samuel el vidente.
1 Cronicas 11:11. Y este es el número de los valientes que David tuvo: Jasobeam hijo de Hacmoni, caudillo de los treinta, el cual blandió su lanza una vez contra trescientos, a los cuales mató.
1 Cronicas 11:20. Y Abisai, hermano de Joab, era jefe de los treinta, el cual blandió su lanza contra trescientos y los mató, y ganó renombre con los tres.
1 Cronicas 12:24. De los hijos de Judá que traían escudo y lanza, seis mil ochocientos, listos para la guerra.
1 Cronicas 12:26. De los hijos de Leví, cuatro mil seiscientos;
1 Cronicas 12:27. asimismo Joiada, príncipe de los del linaje de Aarón, y con él tres mil setecientos,
1 Cronicas 12:30. De los hijos de Efraín, veinte mil ochocientos, muy valientes, varones ilustres en las casas de sus padres.
1 Cronicas 12:32. De los hijos de Isacar, doscientos principales, entendidos en los tiempos, y que sabían lo que Israel debía hacer, cuyo dicho seguían todos sus hermanos.
1 Cronicas 12:35. De los de Dan, dispuestos a pelear, veintiocho mil seiscientos.
1 Cronicas 12:37. Y del otro lado del Jordán, de los rubenitas y gaditas y de la media tribu de Manasés, ciento veinte mil con toda clase de armas de guerra.
1 Cronicas 15:5. de los hijos de Coat, Uriel el principal, y sus hermanos, ciento veinte.
1 Cronicas 15:6. De los hijos de Merari, Asaías el principal, y sus hermanos, doscientos veinte.
1 Cronicas 15:7. De los hijos de Gersón, Joel el principal, y sus hermanos, ciento treinta.
1 Cronicas 15:8. De los hijos de Elizafán, Semaías el principal, y sus hermanos, doscientos.
1 Cronicas 15:10. De los hijos de Uziel, Aminadab el principal, y sus hermanos, ciento doce.
1 Cronicas 21:5. Y había en todo Israel un millón cien mil que sacaban espada, y de Judá cuatrocientos setenta mil hombres que sacaban espada.
1 Cronicas 21:25. Y dio David a Ornán por aquel lugar el peso de seiscientos siclos de oro.
1 Cronicas 25:7. Y el número de ellos, con sus hermanos, instruidos en el canto para Jehová, todos los aptos, fue doscientos ochenta y ocho.
1 Cronicas 26:30. De los hebronitas, Hasabías y sus hermanos, hombres de vigor, mil setecientos, gobernaban a Israel al otro lado del Jordán, al occidente, en toda la obra de Jehová, y en el servicio del rey.
1 Cronicas 26:32. Y sus hermanos, hombres valientes, eran dos mil setecientos, jefes de familias, los cuales el rey David constituyó sobre los rubenitas, los gaditas y la media tribu de Manasés, para todas las cosas de Dios y los negocios del rey.
2 Cronicas 1:14. Y juntó Salomón carros y gente de a caballo; y tuvo mil cuatrocientos carros y doce mil jinetes, los cuales puso en las ciudades de los carros y con el rey en Jerusalén.
2 Cronicas 1:17. Y subían y compraban en Egipto un carro por seiscientas piezas de plata, y un caballo por ciento cincuenta; y así compraban por medio de ellos, para todos los reyes de los heteos, y para los reyes de Siria.
2 Cronicas 2:17. Y contó Salomón todos los hombres extranjeros que había en la tierra de Israel, después de haberlos ya contado David su padre, y fueron hallados ciento cincuenta y tres mil seiscientos.
2 Cronicas 2:18. Y señaló de ellos setenta mil para llevar cargas, y ochenta mil canteros en la montaña, y tres mil seiscientos por capataces para hacer trabajar al pueblo.
2 Cronicas 3:4. El pórtico que estaba al frente del edificio era de veinte codos de largo, igual al ancho de la casa, y su altura de ciento veinte codos; y lo cubrió por dentro de oro puro.
2 Cronicas 3:8. Hizo asimismo el lugar santísimo, cuya longitud era de veinte codos según el ancho de la casa, y su anchura de veinte codos; y lo cubrió de oro fino que ascendía a seiscientos talentos.
2 Cronicas 5:12. y los levitas cantores, todos los de Asaf, los de Hemán, y los de Jedutún, juntamente con sus hijos y sus hermanos, vestidos de lino fino, estaban con címbalos y salterios y arpas al oriente del altar; y con ellos ciento veinte sacerdotes que tocaban trompetas:)
2 Cronicas 7:5. Y ofreció el rey Salomón en sacrificio veinte y dos mil bueyes, y ciento y veinte mil ovejas; y así dedicaron la casa de Dios el rey y todo el pueblo.
2 Cronicas 8:10. Y tenía Salomón doscientos cincuenta gobernadores principales, los cuales mandaban sobre aquella gente.
2 Cronicas 8:18. Porque Hiram le había enviado naves por mano de sus siervos, y marineros diestros en el mar, los cuales fueron con los siervos de Salomón a Ofir, y tomaron de allá cuatrocientos cincuenta talentos de oro, y los trajeron al rey Salomón.
2 Cronicas 9:9. Y dio al rey ciento veinte talentos de oro, y gran cantidad de especias aromáticas , y piedras preciosas: nunca hubo tales especias aromáticas como los que dio la reina de Sabá al rey Salomón.
2 Cronicas 9:13. El peso de oro que venía a Salomón cada año, era seiscientos sesenta y seis talentos de oro,
2 Cronicas 9:15. Hizo también el rey Salomón doscientos paveses de oro batido, cada uno de los cuales tenía seiscientos siclos de oro labrado:
2 Cronicas 9:16. asimismo trescientos escudos de oro batido, teniendo cada escudo trescientos siclos de oro: y los puso el rey en la casa del bosque del Líbano.
2 Cronicas 11:1. Cuando vino Roboam a Jerusalén , reunió de la casa de Judá y de Benjamín a ciento ochenta mil hombres escogidos de guerra, para pelear contra Israel y hacer volver el reino a Roboam.
2 Cronicas 12:3. Con mil doscientos carros, y con sesenta mil hombres de a caballo: mas el pueblo que venía con él de Egipto, esto es, de libios, suquienos, y etíopes, no tenía número.
2 Cronicas 13:3. Entonces Abías ordenó batalla con un ejército de cuatrocientos mil hombres de guerra valerosos y escogidos: y Jeroboam ordenó batalla contra él con ochocientos mil hombres escogidos, fuertes y valerosos.
2 Cronicas 14:8. Tuvo también Asa ejército que traía escudos y lanzas: de Judá trescientos mil, y de Benjamín doscientos ochenta mil que traían escudos y entesaban arcos; todos hombres diestros.
2 Cronicas 14:9. Y salió contra ellos Zera etíope con un ejército de millones, y trescientos carros; y vino hasta Maresa.
2 Cronicas 15:11. Y en aquel mismo día sacrificaron a Jehová, del botín que habían traído, setecientos bueyes y siete mil ovejas.
2 Cronicas 17:11. Y traían de los Filisteos presentes a Josafat, y tributos de plata. Los Arabes también le trajeron ganados, siete mil setecientos carneros y siete mil setecientos machos cabrío.
2 Cronicas 17:14. Y este es el número de ellos según sus casas paternas: de los jefes de los millares de Judá, el general Adna, y con él trescientos mil hombres muy esforzados;
2 Cronicas 17:15. Después de él, el jefe Johanán, y con él doscientos ochenta mil;
2 Cronicas 17:16. Tras éste, Amasías hijo de Zicri, el cual se había ofrecido voluntariamente a Jehová, y con él doscientos mil hombres valientes;
2 Cronicas 17:17. De Benjamín, Eliada, hombre muy valeroso, y con él doscientos mil armados de arco y escudo;
2 Cronicas 17:18. Tras éste, Jozabad, y con él ciento ochenta mil dispuestos para la guerra.
2 Cronicas 18:5. Entonces el rey de Israel reunió a cuatrocientos profetas, y les preguntó: ¿Iremos a la guerra contra Ramot de Galaad, o me estaré quieto? Y ellos dijeron: Sube, porque Dios los entregará en mano del rey.
2 Cronicas 24:15. Mas Joiada envejeció, y murió lleno de días: de ciento y treinta años era cuando murió.
2 Cronicas 25:5. Reunió luego Amasías a Judá, y con arreglo a las familias les puso jefes de millares y de centenas sobre todo Judá y Benjamín. Después puso en lista a todos los de veinte años arriba, y fueron hallados trescientos mil escogidos para salir a la guerra, que tenían lanza y escudo.
2 Cronicas 25:23. Y Joás rey de Israel prendió en Bet-semes a Amasías rey de Judá, hijo de Joás hijo de Joacaz, y lo llevóa Jerusalén : y derribó el muro de Jerusalén desde la puerta de Efraín hasta la puerta del ángulo, un tramo de cuatrocientos codos.
2 Cronicas 26:12. Todo el número de los jefes de familias, valientes y esforzados, era dos mil seiscientos.
2 Cronicas 26:13. Y bajo la mano de éstos estaba el ejército de guerra, de trescientos siete mil quinientos guerreros poderosos y fuertes, para ayudar al rey contra los enemigos.
2 Cronicas 28:6. Porque Peka, hijo de Remalías mató en Judá en un día ciento veinte mil hombres valientes; por cuanto habían dejado a Jehová el Dios de sus padres.
2 Cronicas 28:8. También los hijos de Israel tomaron cautivos de sus hermanos doscientos mil, mujeres, muchachos, y muchachas, además de haber tomado de ellos mucho botín, que llevaron a Samaria.
2 Cronicas 29:32. Y fue el número de los holocaustos que trajo la congregación, setenta bueyes, cien carneros y doscientos corderos; todo para el holocausto de Jehová.
2 Cronicas 29:33. Y las ofrendas fueron seiscientos bueyes, y tres mil ovejas.
2 Cronicas 35:8. También sus príncipes dieron con liberalidad al pueblo y a los sacerdotes y levitas. Hilcías, Zacarías y Jehiel, oficiales de la casa de Dios, dieron a los sacerdotes, para celebrar la pascua, dos mil seiscientas ovejas, y trescientos bueyes.
Esdras 1:11. Todos los utensilios de oro y de plata eran cinco mil cuatrocientos. Todos los hizo llevar Sesbasar con los que subieron del cautiverio de Babilonia a Jerusalén.
Esdras 2:3. Los hijos de Paros, dos mil ciento setenta y dos.
Esdras 2:4. Los hijos de Sefatías, trescientos setenta y dos.
Esdras 2:5. Los hijos de Ara, setecientos setenta y cinco.
Esdras 2:6. Los hijos de Pahat-moab, de los hijos de Jesúa y de Joab, dos mil ochocientos doce.
Esdras 2:7. Los hijos de Elam, mil doscientos cincuenta y cuatro.
Esdras 2:8. Los hijos de Zatu, novecientos cuarenta y cinco.
Esdras 2:9. Los hijos de Zacai, setecientos sesenta.
Esdras 2:10. Los hijos de Bani, seiscientos cuarenta y dos.
Esdras 2:11. Los hijos de Bebai, seiscientos veintitrés.
Esdras 2:12. Los hijos de Azgad, mil doscientos veintidós.
Esdras 2:13. Los hijos de Adonicam, seiscientos sesenta y seis.
Esdras 2:15. Los hijos de Adín, cuatrocientos cincuenta y cuatro.
Esdras 2:17. Los hijos de Bezai, trescientos veintitrés.
Esdras 2:18. Los hijos de Jora, ciento doce.
Esdras 2:19. Los hijos de Hasum, doscientos veintitrés.
Esdras 2:21. Los hijos de Belén, ciento veintitrés.
Esdras 2:23. Los varones de Anatot, ciento veintiocho.
Esdras 2:25. Los hijos de Quiriat-jearim, Cafira y Beerot, setecientos cuarenta y tres.
Esdras 2:26. Los hijos de Ramá y Geba, seiscientos veintiuno.
Esdras 2:27. Los varones de Micmas, ciento veintidós.
Esdras 2:28. Los varones de Bet-el y Hai, doscientos veintitrés.
Esdras 2:30. Los hijos de Magbis, ciento cincuenta y seis.
Esdras 2:31. Los hijos del otro Elam, mil doscientos cincuenta y cuatro.
Esdras 2:32. Los hijos de Harim, trescientos veinte.
Esdras 2:33. Los hijos de Lod, Hadid y Ono, setecientos veinticinco.
Esdras 2:34. Los hijos de Jericó, trescientos cuarenta y cinco.
Esdras 2:35. Los hijos de Senaa, tres mil seiscientos treinta.
Esdras 2:36. Los sacerdotes: los hijos de Jedaías, de la casa de Jesúa, novecientos setenta y tres.
Esdras 2:38. Los hijos de Pasur, mil doscientos cuarenta y siete.
Esdras 2:41. Los cantores: los hijos de Asaf, ciento veintiocho.
Esdras 2:42. Los hijos de los porteros: los hijos de Salum, los hijos de Ater, los hijos de Talmón, los hijos de Acub, los hijos de Hatita, los hijos de Sobai; por todos, ciento treinta y nueve.
Esdras 2:58. Todos los sirvientes del templo, e hijos de los siervos de Salomón, trescientos noventa y dos.
Esdras 2:60. los hijos de Delaía, los hijos de Tobías, los hijos de Necoda, seiscientos cincuenta y dos.
Esdras 2:64. Toda la congregación, unida como un solo hombre, era de cuarenta y dos mil trescientos sesenta,
Esdras 2:65. sin contar sus siervos y siervas, los cuales eran siete mil trescientos treinta y siete; y tenían doscientos cantores y cantoras.
Esdras 2:66. Sus caballos eran setecientos treinta y seis; sus mulas, doscientas cuarenta y cinco;
Esdras 2:67. sus camellos, cuatrocientos treinta y cinco; asnos, seis mil setecientos veinte.
Esdras 6:17. Y ofrecieron en la dedicación de esta casa de Dios cien becerros, doscientos carneros y cuatrocientos corderos; y doce machos cabríos en expiación por todo Israel, conforme al número de las tribus de Israel.
Esdras 8:3. De los hijos de Secanías y de los hijos de Paros, Zacarías, y con él, en la línea de varones, ciento cincuenta.
Esdras 8:4. De los hijos de Pahat-moab, Elioenai hijo de Zeraías, y con él doscientos varones.
Esdras 8:5. De los hijos de Secanías, el hijo de Jahaziel, y con él trescientos varones.
Esdras 8:9. De los hijos de Joab, Obadías hijo de Jehiel, y con él doscientos dieciocho varones.
Esdras 8:10. De los hijos de Selomit, el hijo de Josifías, y con él ciento sesenta varones.
Esdras 8:12. De los hijos de Azgad, Johanán hijo de Hacatán, y con él ciento diez varones;
Esdras 8:20. y de los sirvientes del templo, a quienes David con los príncipes puso para el ministerio de los levitas, doscientos veinte sirvientes del templo, todos los cuales fueron designados por sus nombres.
Esdras 8:26. Pesé, pues, en manos de ellos seiscientos cincuenta talentos de plata, y utensilios de plata por cien talentos, y cien talentos de oro;
Nehemias 5:17. Además, ciento cincuenta judíos y oficiales, y los que venían de las naciones que había alrededor de nosotros, estaban a mi mesa.
Nehemias 7:8. Los hijos de Paros, dos mil ciento setenta y dos.
Nehemias 7:9. Los hijos de Sefatías, trescientos setenta y dos.
Nehemias 7:10. Los hijos de Ara, seiscientos cincuenta y dos.
Nehemias 7:11. Los hijos de Pahat-moab, de los hijos de Jesúa y de Joab, dos mil ochocientos dieciocho.
Nehemias 7:12. Los hijos de Elam, mil doscientos cincuenta y cuatro.
Nehemias 7:13. Los hijos de Zatu, ochocientos cuarenta y cinco.
Nehemias 7:14. Los hijos de Zacai, setecientos sesenta.
Nehemias 7:15. Los hijos de Binúi, seiscientos cuarenta y ocho.
Nehemias 7:16. Los hijos de Bebai, seiscientos veintiocho.
Nehemias 7:17. Los hijos de Azgad, dos mil seiscientos veintidós.
Nehemias 7:18. Los hijos de Adonicam, seiscientos sesenta y siete.
Nehemias 7:20. Los hijos de Adín, seiscientos cincuenta y cinco.
Nehemias 7:22. Los hijos de Hasum, trescientos veintiocho.
Nehemias 7:23. Los hijos de Bezai, trescientos veinticuatro.
Nehemias 7:24. Los hijos de Harif, ciento doce.
Nehemias 7:26. Los varones de Belén y de Netofa, ciento ochenta y ocho.
Nehemias 7:27. Los varones de Anatot, ciento veintiocho.
Nehemias 7:29. Los varones de Quiriat-jearim, Cafira y Beerot, setecientos cuarenta y tres.
Nehemias 7:30. Los varones de Ramá y de Geba, seiscientos veintiuno.
Nehemias 7:31. Los varones de Micmas, ciento veintidós.
Nehemias 7:32. Los varones de Bet-el y de Hai, ciento veintitrés.
Nehemias 7:34. Los hijos del otro Elam, mil doscientos cincuenta y cuatro.
Nehemias 7:35. Los hijos de Harim, trescientos veinte.
Nehemias 7:36. Los hijos de Jericó, trescientos cuarenta y cinco.
Nehemias 7:37. Los hijos de Lod, Hadid y Ono, setecientos veintiuno.
Nehemias 7:38. Los hijos de Senaa, tres mil novecientos treinta.
Nehemias 7:39. Sacerdotes: los hijos de Jedaía, de la casa de Jesúa, novecientos setenta y tres.
Nehemias 7:41. Los hijos de Pasur, mil doscientos cuarenta y siete.
Nehemias 7:44. Cantores: los hijos de Asaf, ciento cuarenta y ocho.
Nehemias 7:45. Porteros: Los hijos de Salum, los hijos de Ater, los hijos de Talmón, los hijos de Acub, los hijos de Hatita y los hijos de Sobai, ciento treinta y ocho.
Nehemias 7:60. Todos los sirvientes del templo e hijos de los siervos de Salomón, trescientos noventa y dos.
Nehemias 7:62. los hijos de Delaía, los hijos de Tobías y los hijos de Necoda, seiscientos cuarenta y dos.
Nehemias 7:66. Toda la congregación junta era de cuarenta y dos mil trescientos sesenta,
Nehemias 7:67. sin sus siervos y siervas, que eran siete mil trescientos treinta y siete; y entre ellos había doscientos cuarenta y cinco cantores y cantoras.
Nehemias 7:68. Sus caballos, setecientos treinta y seis; sus mulos, doscientos cuarenta y cinco;
Nehemias 7:69. camellos, cuatrocientos treinta y cinco; asnos, seis mil setecientos veinte.
Nehemias 11:6. Todos los hijos de Fares que moraron en Jerusalén fueron cuatrocientos sesenta y ocho hombres fuertes.
Nehemias 11:8. Y tras él Gabai y Salai, novecientos veintiocho.
Nehemias 11:12. y sus hermanos, los que hacían la obra de la casa, ochocientos veintidós; y Adaías hijo de Jeroham, hijo de Pelalías, hijo de Amsi, hijo de Zacarías, hijo de Pasur, hijo de Malquías,
Nehemias 11:13. y sus hermanos, jefes de familias, doscientos cuarenta y dos; y Amasai hijo de Azareel, hijo de Azai, hijo de Mesilemot, hijo de Imer,
Nehemias 11:14. y sus hermanos, hombres de gran vigor, ciento veintiocho, el jefe de los cuales era Zabdiel hijo de Gedolim.
Nehemias 11:18. Todos los levitas en la santa ciudad eran doscientos ochenta y cuatro.
Nehemias 11:19. Los porteros, Acub, Talmón y sus hermanos, guardas en las puertas, ciento setenta y dos.
Ester 1:1. Aconteció en los días de Asuero, el Asuero que reinó desde la India hasta Etiopía sobre ciento veintisiete provincias,
Ester 1:4. para mostrar él las riquezas de la gloria de su reino, el brillo y la magnificencia de su poder, por muchos días, ciento ochenta días.
Ester 8:9. Entonces fueron llamados los escribanos del rey en el mes tercero, que es Siván, a los veintitrés días de ese mes; y se escribió conforme a todo lo que mandó Mardoqueo, a los judíos, y a los sátrapas, los capitanes y los príncipes de las provincias que había desde la India hasta Etiopía, ciento veintisiete provincias; a cada provincia según su escritura, y a cada pueblo conforme a su lengua, a los judíos también conforme a su escritura y lengua.
Ester 9:15. Y los judíos que estaban en Susa se juntaron también el catorce del mes de Adar, y mataron en Susa a trescientos hombres; pero no tocaron sus bienes.
Ester 9:30. Y fueron enviadas cartas a todos los judíos, a las ciento veintisiete provincias del rey Asuero, con palabras de paz y de verdad,
Job 42:16. Después de esto vivió Job ciento cuarenta años, y vio a sus hijos, y a los hijos de sus hijos, hasta la cuarta generación.
Isaias 37:36. Y salió el ángel de Jehová y mató a ciento ochenta y cinco mil en el campamento de los asirios; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos.
Jeremias 52:23. Había noventa y seis granadas en cada hilera; todas ellas eran ciento sobre la red alrededor.
Ezequiel 4:5. Yo te he dado los años de su maldad por el número de los días, trescientos noventa días; y así llevarás tú la maldad de la casa de Israel.
Ezequiel 4:9. Y tú toma para ti trigo, cebada, habas, lentejas, millo y avena, y ponlos en una vasija, y hazte pan de ellos el número de los días que te acuestes sobre tu lado; trescientos noventa días comerás de él.
Daniel 6:1. Pareció bien a Darío constituir sobre el reino ciento veinte sátrapas, que gobernasen en todo el reino.
Daniel 12:11. Y desde el tiempo que sea quitado el continuo sacrificio hasta la abominación desoladora, habrá mil doscientos noventa días.
Daniel 12:12. Bienaventurado el que espere, y llegue a mil trescientos treinta y cinco días.
Amos 5:3. Porque así ha dicho Jehová el Señor: La ciudad que salga con mil, volverá con ciento, y la que salga con ciento volverá con diez, en la casa de Israel.
Jonas 4:11. ¿Y no tendré yo piedad de Nínive, aquella gran ciudad donde hay más de ciento veinte mil personas que no saben discernir entre su mano derecha y su mano izquierda, y muchos animales?
Zacarias 11:8. Y destruí a tres pastores en un mes; pues mi alma se impacientó contra ellos, y también el alma de ellos me aborreció a mí.
Mateo 13:8. Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.
Mateo 13:23. Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno.
Marcos 4:8. Pero otra parte cayó en buena tierra, y dio fruto, pues brotó y creció, y produjo a treinta, a sesenta, y a ciento por uno.
Marcos 4:20. Y éstos son los que fueron sembrados en buena tierra: los que oyen la palabra y la reciben, y dan fruto a treinta, a sesenta, y a ciento por uno.
Marcos 6:37. Respondiendo él, les dijo: Dadles vosotros de comer. Ellos le dijeron: ¿Que vayamos y compremos pan por doscientos denarios, y les demos de comer?
Marcos 6:40. Y se recostaron por grupos, de ciento en ciento, y de cincuenta en cincuenta.
Marcos 14:5. Porque podía haberse vendido por más de trescientos denarios, y haberse dado a los pobres. Y murmuraban contra ella.
Lucas 8:8. Y otra parte cayó en buena tierra, y nació y llevó fruto a ciento por uno. Hablando estas cosas, decía a gran voz: El que tiene oídos para oír, oiga.
Juan 6:7. Felipe le respondió: Doscientos denarios de pan no bastarían para que cada uno de ellos tomase un poco.
Juan 12:5. ¿Por qué no fue este perfume vendido por trescientos denarios, y dado a los pobres?
Juan 21:8. Y los otros discípulos vinieron con la barca, arrastrando la red de peces, pues no distaban de tierra sino como doscientos codos.
Juan 21:11. Subió Simón Pedro, y sacó la red a tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y aun siendo tantos, la red no se rompió.
Hechos 1:15. En aquellos días Pedro se levantó en medio de los hermanos (y los reunidos eran como ciento veinte en número), y dijo:
Hechos 5:36. Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien. A éste se unió un número como de cuatrocientos hombres; pero él fue muerto, y todos los que le obedecían fueron dispersados y reducidos a nada.
Hechos 7:6. Y le dijo Dios así: Que su descendencia sería extranjera en tierra ajena, y que los reducirían a servidumbre y los maltratarían, por cuatrocientos años.
Hechos 13:20. Después, como por cuatrocientos cincuenta años, les dio jueces hasta el profeta Samuel.
Hechos 23:23. Y llamando a dos centuriones, mandó que preparasen para la hora tercera de la noche doscientos soldados, setenta jinetes y doscientos lanceros, para que fuesen hasta Cesarea;
Galatas 3:17. Esto, pues, digo: El pacto previamente ratificado por Dios para con Cristo, la ley que vino cuatrocientos treinta años después, no lo abroga, para invalidar la promesa.
Apocalipsis 7:4. Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel.
Apocalipsis 9:16. Y el número de los ejércitos de los jinetes era doscientos millones. Yo oí su número.
Apocalipsis 11:3. Y daré a mis dos testigos que profeticen por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio.
Apocalipsis 12:6. Y la mujer huyó al desierto, donde tiene lugar preparado por Dios, para que allí la sustenten por mil doscientos sesenta días.
Apocalipsis 13:18. Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.
Apocalipsis 14:1. Después miré, y he aquí el Cordero estaba en pie sobre el monte de Sion, y con él ciento cuarenta y cuatro mil, que tenían el nombre de él y el de su Padre escrito en la frente.
Apocalipsis 14:3. Y cantaban un cántico nuevo delante del trono, y delante de los cuatro seres vivientes, y de los ancianos; y nadie podía aprender el cántico sino aquellos ciento cuarenta y cuatro mil que fueron redimidos de entre los de la tierra.
Apocalipsis 14:20. Y fue pisado el lagar fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre hasta los frenos de los caballos, por mil seiscientos estadios.
Apocalipsis 21:17. Y midió su muro, ciento cuarenta y cuatro codos, de medida de hombre, la cual es de ángel.